A pesar de las restricciones de movilidad impuestas por la pandemia y las medidas medioambientales decretadas contra el uso del coche, los municipios españoles no renuncian a los elevados ingresos que genera el famoso «número de coche».
Según el último informe sobre fiscalidad municipal elaborado por la organización para la protección de los conductores, Conductores europeos asociados (EAS), El impuesto municipal para vehículos de propulsión mecánica proporcionará este año a las casas municipales una recaudación de 3.800 millones de euros. Así, 36.403.276 propietarios de vehículos (desde ciclomotores hasta camiones pesados) pronto tendrán que pagar este impuesto aunque no los utilicen.
La tarifa se paga sobre la base el poder fiscal del vehículo (unidad que indica la carga fiscal a aplicar a cada vehículo y calculada por cilindrada del motor y número de cilindros, de modo que cuanto más altos estos dos valores, mayor es el impuesto que se le atribuye al vehículo), en el caso de los turismos; en función de la cilindrada, en el caso de las motocicletas, y del peso y número de plazas, en el caso de camiones y autobuses, respectivamente, según tarifa mínima fijada para todo el territorio nacional, Excepto los territorios históricos del País Vasco y Navarra.
Como muestra el estudio, de las 52 provincias, sólo Córdoba, Teruel y Toledo redujeron el impuesto entre un 1 y un 4%. El resto mantiene las tarifas del año pasado, teniendo en cuenta que 12 municipios llevan muchos años aplicando el máximo permitido por la ley (Granada, Huelva, Valladolid, Ciudad Real, Barcelona Lleida, Tarragona, Palma, San Sebastián, Vitoria y Ceuta) .
Diferencias superiores al 150%
Así, por ejemplo, un vehículo de tipo medio, con 11,99 caballos de potencia, como los de Dacia Sandero, el vehículo más vendido en 2020, paga en el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife. 34,08 euros; en Madrid 59 euros, en Barcelona 68,16 euros, y en San Sebastián 86,64 euros. Es decir, un 150% más caro en San Sebastián que en Tenerife.
Entre los municipios españoles más caros, además de San Sebastián, la AEA cita en su informe los de Vitoria, Bilbao, Castellón, Tarragona, Barcelona, Palma, Ciudad Real, Valladolid, Huelva y Granada. Por el contrario, entre los que podrían considerarse «paraíso fiscal» estarían Santa Cruz de Tenerife, Melilla, Zamora, Cáceres, Palencia, Jaén y Badajoz.
¿Qué bonificaciones hay?
La ley permite la aplicación descuentos de hasta el 75% en función de las características del combustible y del motor (para eléctrico), e incluso exentos del pago de impuestos sobre vehículos históricos de más de 25 años, debido a la enmienda que la AEA pudo introducir en 1999 en la Ley de Finanzas Locales. Desde entonces, cientos de miles de conductores han evitado pagar este impuesto a cambio de preservar un patrimonio que forma parte de una determinada era de la producción de automóviles.
Pero es esta facultad discrecional de los ayuntamientos la que ha distorsionado la finalidad del sistema fiscal y ha propiciado la creación en España de verdaderos «paraísos fiscales» en relación con el pago de un impuesto por valor de más de 36 millones de euros. contribuyentes. obligatorios ”, detallan en el informe.
Registro de «paraísos fiscales» en España
El informe de la AEA indica que aún existen importantes diferencias de tarifas entre los distintos municipios españoles, en algunos casos más del 365%, lo que explica el fenómeno de la matriculación de vehículos en verdaderos «paraísos fiscales».
La AEA explica que el origen de este fenómeno debe buscarse en eliminación del código provincial de los números de registro españoles en septiembre de 2000, que esta circunstancia permite a las empresas de alquiler o alquiler de vehículos concentrar el registro de sus flotas en municipios de nueva población con tratamiento fiscal favorable. En cambio, todos los años reciben ingresos de un impuesto sobre los vehículos que ni siquiera conducen y nunca conducirán en esa población.
Así, podemos ver cómo en siete municipios españoles (Colmenar de Arroyo, Robledo de Chavela Moralzarzal, Venturada, Las Rozas de Puerto Real y Brunete, en Madrid; y Rajadell, en Barcelona), con una población entre 500 y 14.000 habitantes, El 37,5% de todos los coches de servicio en España se matricularon por trato fiscal preferencial. Eso es 159,811 autos de un total nacional de 425,020 unidades. “En Castielfabib, un pequeño municipio valenciano donde, a pesar de la crisis y tras reducir su población en 7 vecinos, el número de vehículos matriculados en 2020 se ha triplicado respecto al año anterior, de 768 a 2.688 unidades”, afirman de la AEA.